2 de Octubre de 2012
En el continente américano, la concienciación hacía modelos de desarrollo sostenibles y responsables socio-económicamente, está latente y prueba de ello es el dinamismo que la llamada `economía verde´ y los sectores de la ecoindustria están protagonizando en ciertos países del norte y el sur del continente. México es uno de los países más dinámicos en este sentido con multitud de iniciativas y nuevos proyectos que poco a poco se van desarrollando y consolidando en un entorno de cambio inexorable hacia políticas y acciones particulares de responsabilidad social, económica y ambiental. En este entorno las entidades financieras tienen mucho que aportar y no pueden ser una excepción a la realidad imperante. CIBanco es buen ejemplo de ello.
CIBanco es una institucin Financiera mexicana que inició sus operaciones en 1984 como Consultora Internacional Casa de Cambio, y que en 2008 se convirtió en institución de banca múltiple. En noviembre de 2011 inició una nueva etapa. Con el fin de identificar nuevas posibilidades de negocio, la administración de CIBanco encabezada por el Presidente de el Consejo de Administración Jorge Rangel de Alba Brunel , llevó a cabo un estudio de mercado entre sus clientes y los de otras instituciones de la banca de tercera generación en Monterrey, Guadalajara y la Ciudad de México. Así surgió la propuesta de ofrecer un servicio de excelencia, mejores tasas y accesibilidad y, sobre todo, brindar un nuevo modelo de banca, en el que los clientes puedan optar por productos financieros vinculados con un compromiso con la sostenibilidad. Transformarse en banco verde permitió diferenciar a CIBanco, convirtiéndose en una alternativa para quienes desean participar de manera activa en la transformación del país a través de una institución que promueve la cultura de responsabilidad ambiental.
Con miras a lograr un lanzamiento exitoso e integrarse en la comunidad mundial de bancos verdes, ejecutivos de CIBanco visitaron instituciones bancarias con esta orientación en Estados Unidos , Sudamérica y Europa. A partir de las experiencias recogidas, se concluyó que lo principal es mantener siempre el enfoque financiero, pues algunas instituciones de este tipo han fracasado por ser excesivamente dogmáticas en cuanto a la ecología.
En abril de 2012 CIBanco se transformó en el primer banco verde de México, con una nueva misión: ser líderes en México en el sector de servicios financieros que prioriza la sostenibilidad como eje de negocio, en beneficio mutuo de las empresas y de las personas.
La vocación de CIBanco no es tan solo un proyecto de responsabilidad social empresarial, sino una nueva visión de los servicios financieros, una manera de rediseñar permanentemente la banca y, como consecuencia, redefinir el concepto verde. Es decir, enfoca el cuidado del medio ambiente desde la perspectiva de la sostenibilidad, utilizando racionalmente los recursos no renovables.
Según la ONU, la crisis de las 3F (por sus siglas en inglés: finance, food, fuel) está ligada a una asignación incorrecta del capital, ya que se han destinado mayores fondos a combustibles fósiles que lo que se ha invertido en energías renovables. Esto demuestra que es imprescindible transformar los modelos económicos y cambiar los hábitos de consumo.
Puesto que la banca es corresponsable en la crisis, un grupo de instituciones financieras establecieron en 2003 los Principios de Ecuador, un conjunto de normas que las empresas del sector bancario adoptan voluntariamente respecto a la gestión social y medioambiental en temas relacionados con la financiación de proyectos. CIBanco fue el primer banco Mexicano en firmarlos en 2012. También se adhirió a la Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (United Nations Environment Programme Finance Initiative UNEP FI), una comunidad de más de 200 instituciones, entre ellas 33 latinoamericanas, cuyo objetivo es identificar las mejores prácticas sostenibles y promover su integración en todos los niveles de operación de las instituciones financieras.
Para fortalecer los programas de banca verde dentro de la institución se creó el puesto del Director de Sostenibilidad, quien está a cargo de los proyectos y políticas sobre el tema y lo representa en cuestiones de evaluación e índices de desarrollo sostenible, tanto de instituciones nacionales como internacionales. También se integró un Comité de Sostenibilidad conformado por cuatro miembros externos de reconocido prestigio en materia de sostenibilidad y muy comprometidos con el medio ambiente en México: Gustavo Alanís, Mario Gómez, Gabriel Quadri y Rodrigo Villar. Este comité se encarga de contribuir al desarrollo de las políticas de sostenibilidad y las tendencias para evaluar los riesgos medioambientales con una visión externa a la Institución , en la asignación de créditos. Asimismo, analiza créditos para negocios verdes o sostenibles y tiene atribuciones para premiar a ciertos clientes, en los tipos o en el plazo del crédito, por su compromiso con el medio ambiente.
Por otra parte, la organización Pro-Natura calculó la huella medioambiental de todas las operaciones de CIBanco, y a partir de sus conclusiones se diseñaron políticas para mitigarla. Por ejemplo, se implementaron estrategias de eco-eficiencia en los corporativos y sucursales para maximizar la productividad de los recursos y minimizar desechos y emisiones; también se hizo el acuerdo de reducir la huella medioambiental en todas las oficinas y sucursales, así como manejar eficientemente los recursos y disminuir el consumo de agua, energía y papel.
Todo el personal de CIBanco ha adoptado este compromiso con acciones como compartir automóvil para ayudar a reducir el índice de emisiones, entre otras. Además, CIBanco mitiga la huella de carbono en todos los viajes áreos de sus ejecutivos, al pagar una cantidad por los contaminantes producidos, que luego se invierte en bosques y otros sumideros de carbono.
Como parte de la transformación se cambió la imagen corporativa. El nuevo logotipo incorpora los colores verde y blanco simbolizando su compromiso con la sostenibilidad y la transparencia.
Productos financieros verdes
CIBanco transformó su misión, visión y valores, para ofrecer servicios financieros a una población cada día más responsable y a un sector empresarial e industrial que prioriza la sostenibilidad en sus operaciones. Como banco verde, ofrece créditos preferenciales a negocios comprometidos con el medio ambiente, a través de proyectos en energías renovables, construcciones sostenibles y empresas que buscan reducir su huella medioambiental.
CIBanco está convencido de que los mayores retos a los que se enfrenta el crecimiento económico en el futuro inmediato, estarán ligados a la eficiencia en el uso de los recursos y la energía. Por ello está lanzando el producto CIPaneles Solares, un crédito para invertir en energías limpias que ofrece un doble beneficio al contribuir a la conservación del medio ambiente desde el ángulo de la rentabilidad: el ahorro de energía o combustibles se traduce en mayor productividad.
Los productos verdes no remplazan a los servicios financieros tradicionales, pero en CIBanco sirven como incentivo para que la gente tome decisiones sostenibles. Por ejemplo, si bien el banco mantiene sus créditos para automóviles con tipos competitivos, CIAuto Verde ofrece los tipos más favorables del mercado para los que generan 180 mg/km de CO2. La filosofía de este producto bancario es muy simple: “quien contamina poco merece mucho”. Este programa, que inició en marzo del 2012, tiene una cartera vencida prácticamente nula. Es muy pronto para sacar conclusiones; pero todo indica que al dirigirse a un nicho más consciente, se está apelando a un mercado responsable en todos los sentidos, incluyendo las finanzas. CIAuto Verde se ha convertido en un referente de los créditos de automóviles, pues creció de un 20% de los créditos otorgados, a un 70%. Además, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP FI) invitó a CIBanco a compartir este producto financiero como una mejor práctica mundial.
Otro producto verde es la Cuenta Sostenible, una cuenta sin papeles, que ofrece diez puntos base adicionales y el SPEI sin coste. Su filosofa es: “menos papel, más internet”. Se trata de una cuenta que perfila el futuro de los servicios bancarios, donde la calidad del servicio va de la mano con la accesibilidad.
También la división de bolsa es parte de la transformación verde, con el Fondo Sostenible + CIVerde: una sociedad de inversión de renta variable que traslada los índices de sostenibilidad de la Bolsa Mexicana de Valores. Su objetivo es integrar una cartera de empresas líquidas y atractivas para la inversión, cuyo compromiso con la sostenibilidad social y ambiental destaque a nivel internacional.
Además CIBanco hace propuestas en el Comité de sostenibilidad de la Asociación de Bancos de México (ABM), para que el sistema financiero mida su impacto ambiental y reduzca su huella de carbono, como un modo de colaborar en la reducción de gases efecto invernadero y disminuir el impacto del cambio climático.
Resultados
En junio del 2012 se realizó un estudio de mercado con 300 clientes de CIBanco y usuarios de la banca, en el área metropolitana, Monterrey y Guadalajara. Los resultados corroboran que el posicionamiento como banco verde fue acertado, pues la gente está cambiando a una nueva manera de hacer las cosas. Asimismo, existe un mejor conocimiento de la marca: CIBanco es el más reconocido y el mejor evaluado entre sus competidores directos; además de que los niveles de recordación y penetración de la publicidad son positivos en función de la inversión.
Por otra parte, la integración de la banca comercial, la banca empresarial y el comercio exterior es una estrategia que ha logrado establecer una clara segmentación de los mercados y ha permitido atender de manera más específica y profesional las diferentes necesidades de los clientes. Con esto se ha logrado un importante crecimiento respecto al segundo trimestre del ejercicio 2011: la colocación alcanzada al cierre del mismo trimestre de 2012 fue de $3,578 millones de pesos.
En general la captación ha mostrado un crecimiento constante, por medio de productos de inversión que satisfacen las necesidades de los diferentes tipos de clientes. En el segundo trimestre del 2012 la confianza que los usuarios han depositado en CIBanco le permitió alcanzar una captación de $13,161 millones de pesos; con un total de 18,653 cuentas. Esto se ha logrado mediante propuestas innovadoras que apelan a la conciencia y compromiso de un nuevo perfil de clientes, cuyo número va en aumento.